Cada emprendedor es un guerrero que lucha constantemente por alcanzar sus sueños, pero para este propósito es indispensable seguir un código de conducta y qué mejor código que el mismo que seguían los legendarios guerreros samuráis del Japón.

Los samuráis eran la clase guerrera del Japón, eran guerreros parecidos militarmente a los caballeros europeos de la edad media, pero fuera del campo de batalla eran absolutamente distintos a ellos en sus vidas cotidianas.

Los samuráis seguían un protocolo específico en cada día de su vida, así como en la guerra.

Inspirado en el bushido, que era el código por el cual vivían los samuráis, he establecido los 7 valiosos principios del emprendedor samurái.

1. GI – Honradez.

Un emprendedor samurái es correcto en todo el sentido de la palabra, para él no existen las medias tintas, las cosas son correctas o incorrectas.

Cuando hace un negocio respeta a las personas con las que emprende dicho negocio y respeta los acuerdos realizados, así como a sus socios y empleados.

No se aprovecha de los demás, no explota a las personas, es justo a la hora de entregar los dividendos y es claro con el dinero que administra.

2. YU – Riesgo.

El riesgo para un emprendedor es parte de su vida, un emprendedor samurái no teme arriesgarse, ocultarse dentro de un caparazón como una tortuga no es forma de vivir para él.

El emprendedor samurái reduce el riesgo al fracaso conociendo a profundidad lo más que puede sobre el negocio en el que quiere invertir, es inteligente, pues no va a ciegas por el camino que va a recorrer.

 3. JIN – Ayuda a los demás.

Mediante una preparación intensa un emprendedor samurái se convierte en el mejor en su campo, ese es su territorio y por eso tiene derecho a reclamarlo.

No es como el resto de las otras personas, se ha instruido tanto que su conocimiento debe ser usado para el bien de los demás.

4. REI – Respeto.

El respeto es una cualidad importante para un emprendedor samurái. El hecho de que sea el mejor en algún campo, tenga dinero o posea una alta posición no es motivo para despreciar a los demás.

No se alegra por los fracasos de otros y celebra los triunfos ajenos. La envidia no es parte de su mundo, no la tolera y la desprecia con euforia.

Es respetuoso de sus competidores, los investiga, sabe todo de ellos, pero no los difama para crear una ventaja.

5. MEYO – Autogestión.

Él se supervisa así mismo, un emprendedor samurái trabaja a conciencia, los resultados que obtiene son fruto de lo que hace diariamente.

Es dueño de su vida, todo lo que hace lo acerca cada vez más a sus objetivos y no puede culpar a otros si fracasa.

Es disciplinado y sacrifica muchas cosas para lograr lo que quiere, aplaza su recompensa, pero sabe que es un sacrificio temporal que en el futuro dará sus frutos.

6. MAKOTO – Tiene acción.

Un emprendedor samurái hace lo que se propone, y ningún obstáculo en éste mundo lo detendrá de lo que ha planificado hacer.

Un emprendedor samurái no se la pasa hablando de lo que quiere hacer, simplemente lo hace, se pone en acción y cumple con su misión.

No confía en aquellos que hablan demasiado, sabe que son personas sin acción y no se asocia con ellas porque sabe que serán piedras atadas a sus piernas.

Hablar y hacer, son para un emprendedor samurái la misma acción.

 7. CHUGO – Leal.

La lealtad hace que un emprendedor samurái cumpla con sus promesas, la lealtad lo convierte en protector de las personas con las que trabaja, no las decepciona con su comportamiento, lucha por sus ideas y no permite que los envidiosos sin propósito las destruyan.

Un emprendedor samurái es tan leal a sus principios que rechazará a todo aquel que no muestre su mismo compromiso, ante la traición desenvainará su espada y de un tajo cortará la relación que tenga con las personas que le fallaron.

Estos son los 7 valiosos principios del emprendedor samurái, aplícalos y compártelos con otros guerreros como tú y seguro el camino hacia la excelencia llegará muy pronto.

¿Y tú, eres u emprendedor samurái?

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